El mundo está cambiando rápidamente en los últimos años, los avances tecnológicos, el big data, la influencia de los millennials, entre otros factores tienen una velocidad a la que el mercado laboral necesita adaptarse para mantenerse a flote.

Según estudios del Foro Económico Mundial, el futuro de los trabajos está marcado por dos grandes ejes: el primero relacionado con la automatización de muchas funciones dentro de las empresas, lo que supone un recorte en los empleos importante.

El segundo, y al que nos enfocaremos en este artículo, tiene que ver con los conocimientos y habilidades que necesitarán los nuevos trabajadores en el futuro inmediato. El dominio de las nuevas tecnologías será uno de los requisitos inminentes, como hace 10 o 15 años lo era tener conocimientos en Microsoft Office. ¿Te acordás?. 

Pero ser expertos y dominar las nuevas tecnologías no alcanzará, es apenas una parte. Los nuevos trabajadores serán valorados también por su capacidad creativa, originalidad e iniciativa. Además del pensamiento crítico, la persuasión y la negociación; la resiliencia, flexibilidad y resolución de problemas complejos. 

Las habilidades blandas

Los nuevos trabajadores tendrán que enfocarse en fortalecer su inteligencia emocional y el desarrollo de habilidades blandas, como el liderazgo, las relaciones interpersonales y la actitud positiva. 

Y por otro lado, existe otro factor que influye al mercado laboral: la importancia que le otorgan a los valores que promueven las empresas donde desean trabajar.

De ello se desprende una afirmación cada vez más presente entre los jóvenes trabajadores, quienes ya no buscan trabajo solamente por necesidad, sino que prestan atención a su pasión y verdadera vocación, relacionada con sus valores y los de la organización a la que desean pertenecer o crear.

La  capacidad de adaptación

En este sentido, los nuevos trabajadores buscan un equilibrio entre su vida profesional y personal, a la que las empresas del futuro deberán (y deben hoy) adaptarse y ayudarlos a encontrar esa armonía.

Es decir, por lado el mercado cambia impulsado por los avances tecnológicos y por ello necesitará con más razón que el factor humano se destaque entre los empleados. Y por el otro, los trabajadores valorarán otras áreas como la vida personal y el tiempo libre. 

Tanto las empresas como los trabajadores deberán desarrollar su habilidad de adaptación a estos cambios que serán progresivos y cada vez más veloces. Y por lo tanto, reflexionar hacia dónde dirigir los esfuerzos.

En Remax Class estamos comprometidos a atender las nuevas necesidades de los trabajadores que buscan autonomía, horarios flexibles, tiempo de calidad con la familia y amigos. Entendemos que adaptarse a las nuevas necesidades del mercado ayudará a las personas que se unan a nuestro equipo a llevar una vida más armónica entre lo laboral y personal.

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